El otro día quería hacer este budín (es una receta clásica con algunos toques míos que incluí en La cocina de Santé) pero no tenía ganas de exprimir limones. Entonces, completamente dominada por la vagancia, decidí usar una jalea de quinotos y mandarina que tenía guardada en lugar de jugo limón.
De más está decir que el jugo de limón puede ser reemplazado por jugo de lo que más les guste, incluso leche vainillada o especiada. Solo tengan en cuenta lo siguiente: hay jugos que son menos intensos, como el de mandarina, por ejemplo. En ese caso deberán acompañar con ralladuras para profundizar los sabores.
Hace como 6 años hice uno con pulpa y jugo de maracuyá, al final lo empapé con almíbar de maracuyá y fue un éxito. Recomiendo.
¡A cocinar!
Budín:
160 g manteca
200 g azúcar
4 huevos
200 g harina
12 g polvo de hornear
Ralladura 3 limones, o naranjas, o mandarinas
100 ml jugo de limón o 100 ml de jalea (del gusto que deseen)
1/4 taza de jalea, almíbar de fruta o almíbar (para humedecer al final)
En un bol, mezclar la harina con la ralladura de limón. En una batidora, realizar una crémage con la manteca y el azúcar, incorporar los huevos de a uno, raspando los bordes del bol si fuera necesario. Incorporar, alternando, la harina con la ralladura y el jugo de limón. La mezcla puede cortarse por el jugo de limón y esto se debe a que el ácido ha cortado la emulsión. Es fácil de recuperar con un poco más de batido. Colocar en budinera grande o individual, cubierta con papel manteca. Hornear por 25 o 30 minutos si el molde es pequeño, o por 40 o 45 minutos si el molde es grande. El budín debe estar bien dorado.
Retirar del horno y humedecer con el almíbar de fruta.
Komentáře